¿Tantas
veces, mis ideas, mis utopías, mis creencias, mis ilusiones me han llevado a
conceptos erróneos y a prácticas equivocadas…?
En
nombre de grandes ideas y de grandes ideales se han llenado campos enteros de
campos de concentración y de lápidas.
¿Aunque usted tenga en su cabeza el sisema sociopolítico más perfecto, quizás los seres humanos quieran llevar y soportar otro más inferior e imperfecto?
Mira
no solo las palabras de las personas, sino también sus intenciones, y sobre
todo sus hechos…
No
puedes estar bajo la obediencia de tu padre durante sesenta años, tampoco bajo
la obediencia de una ideología política sin libertad.
No
me trates como a una piedra, ni como a un animal, soy un ser humano…
¿Te
cansas, a veces, de alegrarte del bien de los demás, y que ellos, ellos no se
alegren del bien que a ti te suceda…?
Nadie
está librado de pequeños o grandes sufrimientos, ni de pequeñas y grandes
felicidades y alegrías. Somos alegrías y penas en proporciones diferentes.
Debes
aprender y aprehender que todo el mundo lleva sobre sus carnes y su mente y su
alma dolores y sufrimientos y penas y angustias.
Que
el deseo que te quieran los demás o algunos, no te lleve a que ese alguno o
esos demás te manipulen, ten engañen, te mientan, te destrocen…
No
puedes curarte tus heridas profundas y tus traumas de forma definitiva, pero al
menos, llévalos con un poco de decoro y de inteligencia…
Si
no tuviésemos tantos complejos de inferioridad, trataríamos a los demás mejor,
y a nosotros también mejor…
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